El Cuate

Aprendió a trabajar en la sierra
Su maestro fue su propio padre
De muy chico labraba la tierra
Lo valiente lo traía en la sangre
A los años salió de su rancho
Hombre de aspiraciones muy grandes

Empezó en el negocio de lleno
Luego, luego llegó a ser pesado
El poder siempre provoca envidias
Y a las Islas Marías lo mandaron
Les cumplió como los meros hombres
Y salió limpio y más preparado

Regresó a trabajar en lo mismo
Y volvió a recobrar su terreno
Muy derecho en sus negociaciones
Por eso es que volvió a ser el bueno
Su manera de ser lo hacía grande
Era bravo y a la vez sereno

¡Y arriba Chihuahua, primo!

Su pasión eran carros de lujo
Las mujeres y también las armas
El dinero le cumplía caprichos
Era un hombre de carrera larga
Pero nunca se enfiestaba solo
Siempre con la plebada y la banda

San Francisco se llama el ranchito
En Chihuahua, el estado más grande
Ahí mero nació este gallito
Y que supo su vida rifarse
Orgulloso de ser de la sierra
Y de su gran maestro, su padre

"La traición es el mal de valientes"
Dice un dicho que es muy verdadero
No se puede confiar en la gente
Compa, Cuate, descansa en el cielo
De seguro allá sigues de fiesta
Con el Teco y tu compadre, Alfredo